Existen soluciones que pueden
resistir en un amplio rango los cambios de pH cuando se le agregan ácidos y
bases. Estas soluciones son llamadas reguladora amortiguadora,
tampón o buffer. Tienen también importancia en la regulación
del pH de la sangre.
Una solución reguladora requiere dos componentes. Uno de ellos debe ser capaz
de neutralizar las bases y el otro los ácidos. Para esto, la solución
reguladora está formada por:
- mezcla de un ácido débil y la base conjugada (ácido débil y su sal)
- mezcla de una base débil y el ácido conjugado (base débil y su sal)
Ejemplo: se puede preparar un Buffer mezclando en medio acuoso acido acético
(CH3COOH) y acetato de sodio (CH3COONa), sal que contiene la base conjugada CH3COO-.
Del mismo modo, se puede obtener una solución reguladora mezclando en partes
iguales amoniaco (NH3) y cloruro de amonio (NH4Cl).
Ejemplo:
CH3COOH + H2O <---> H3O+ + CH3COO-
CH3COONa ---> CH3COO- + Na+
Si a la solución reguladora se le agrega una pequeña cantidad de ácido fuerte
(HCl), el ion H3O+
es neutralizado por el ion CH3COO-,
formando una cantidad equivalente de CH3COOH. En el caso que se añada una pequeña cantidad de
base fuerte, el ion OH- es neutralizado por el CH3COOH para dar una cantidad equivalente de CH3COO-.
El pH de la solución amortiguadora depende de la constante Ka y de las
concentraciones relativas de acido y base que la forman: HA + H2O <-------> H3O+
+ A-, donde la constante es Ka=[H3O+][A-]/
[HA]
reordenando la ecuación resulta: [H3O+]=
Ka [HA]/ [A-], tomando el logaritmo de ambos miembros de la ecuación:
pH= pKa + log [A-]/[HA]
también se expresa como:
pH= pKa + log [base]/[ácido]
conocida como ecuación de
Henderson-Hasselbach.